Sustituir el plástico es posible. Sea una bandeja, cubiertos, suela de calzado o hasta partes de autos, con la conjunción de un hongo comestible y desechos industriales aparece un nuevo biomaterial como alternativa ecológica al uso del plástico.
Sin embargo, si bien se conocen los materiales de la fórmula, cómo llegar a ella es un secreto. Solamente tres empresas en el mundo, ubicadas en Estados Unidos y en Europa, producen sus productos a partir de ese biomaterial. Ahora se sumó una cuarta y es uruguaya.
El Ingeniero en Biotecnología graduado de la Universidad ORT Uruguay Felipe Machado y la magíster en Ciencias Biológicas Gabriela da Rosa, tras numerosos intentos, pudieron llegar a este biomaterial —que aún no tiene nombre oficialmente—. “Nosotros trabajamos en microbiología y sabíamos que estaba hecho con un hongo que crece en la madera y con desechos lignocelulósicos, como el trigo o la paja. A partir de ahí probamos con varios hongos, y diferentes sustratos y condiciones para hacer el mismo material, porque está buenísimo”, contó Da Rosa.
Una vez alcanzado el material, Guadalupe Sonneveld, Licenciada en Diseño Industrial por ORT, se asoció a los dos científicos para completar la pata de diseño que le faltaba al proyecto. Hoy, los tres juntos encabezan Hifa, emprendimiento que cuenta con el apoyo del Centro de Innovación y Emprendimientos (CIE) de la universidad, y que apunta a lanzar al mercado próximamente sus productos ecológicos.
Desde cubiertos de plástico hasta suelas de calzados
¿Cómo se produce el biomaterial? Primero se coloca el sustrato —aserrín o cáscara de arroz, por ejemplo— deseado en un molde, junto con el hongo. Este último se alimenta de ese sustrato al tiempo que va creciendo a partir de la forma del molde. Finalmente, una vez que alcanza la forma deseada, se mata al hongo. La producción lleva un total de siete días.
Según Machado, la potencialidad del biomaterial es lo que los llevó a dar con él. “Generamos un biomaterial a partir de desechos, es decir, sacamos contaminantes del ambiente; y también lo ayudamos, porque es biodegradable. Además, se caracteriza por ser resistente al agua, es aislante acústico y térmico, y no se prende fuego”, contó el ingeniero.
De acuerdo a Da Rosa, dadas sus particularidades, el biomaterial puede sustituir “cualquier cosa de plástico”. En este sentido, Sonneveld agregó que en Estados Unidos, por ejemplo, una empresa comenzó trabajando con packaging y hoy se está especializando en la parte textil, en cueros vegetales. “Otra empresa europea está haciendo baldosas, revestimientos y modulares de absorción acústica. También está asociada con Nike, para hacer parte de la goma de la suela de los championes”, explicó.
Sea lo que sea de plástico, se puede generar con este biomaterial, sin importar si es rígido o flexible. Es que, por lo que explicó Da Rosa, todo depende del sustrato que se utiliza, las condiciones que se le da al hongo para que crezca y el molde en el que se lo coloca.
Pasos lentos pero firmes
El primer producto que Hifa lanzará al mercado consistirá en paneles de revestimiento de pared. Los emprendedores ya han dialogado con diversos estudios de arquitectura y diseño, que se han mostrado muy entusiasmados con la potencialidad del material. Es más, La Casa Uruguaya, iniciativa de ORT, incorporará estos paneles entre paredes para ser usados como aislantes térmicos.
“Lo que proponemos de diferente es que cada pieza es una tesela (pieza con la que se forma un mosaico) única. Si bien se trata de un proceso estándar y la forma es la misma en todos los casos, el diseño es diferente en cada panel, porque el hongo crece de manera distinta en cada molde”, explicó Sonneveld. La idea de Hifa es recordar al cliente que el producto fue hecho por un microorganismo vivo. “Esto acompaña las tendencias actuales, no solo por usar materiales sustentables, sino también por la conexión que el producto genera con la naturaleza”, agregó la diseñadora.
Aunque es cierto que el biomaterial surge como una excelente oportunidad para comenzar a erradicar el plástico, Hifa debe ir dando pasos lentos pero firmes en el mercado. “Si empezáramos a producir bandejas o vasos, no seríamos competitivos. Queremos meternos en el mercado con productos que tienen márgenes grandes, para después sí, una vez que está todo andando, bajar el margen de los productos y hacer packaging”, explicó Machado.
Los emprendedores presentaron sus ideas ante la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y fue aprobado el proyecto para la validación técnica y de la idea de negocios, por lo que próximamente Hifa estará en condiciones de sacar a la venta su primer producto.