Alfonso Lourido es diseñador gráfico de profesión. Actualmente, se dedica al arte y la explora en muchas de sus formas. En cada desafío que toma, pone mucho de sí y genera diálogo y relación entre las distintas disciplinas artísticas.
Si bien dice que en bachillerato no tenía claro qué carrera estudiar, siempre supo que sería algo vinculado al mundo visual. Incluso él se define como “un ser visual” y eso, lo tuvo claro desde niño.
“Me pasé la secundaria llenando cuadernos enteros de dibujos, piraba con los cómics, me encantaban las tapas de los discos, me despertaba curiosidad las herramientas que se usaban para esas composiciones tan copadas que nos dejaba la discografía de los 80 y 90”, cuenta Alfonso Lourido sobre la adolescencia que lo llevó a estudiar la Licenciatura en Diseño Gráfico en ORT.
Arte narrativo y atemporal
En lo que refiere a su trabajo artístico, Alfonso es muy versátil: “Me gusta mucho explorar: plástica, ilustración, fotografía, animación, film”. Si bien cada una de ellas tiene sus particularidades, encuentra puntos en común que le parecen interesantes.
Alfonso define su arte como narrativo: “Creo que el poder narrativo de la imagen tiene algo muy especial”, dice. Para explicar esto, compara las imágenes con los cuentos. En ellos hay una voz clara, un narrador. Sin embargo, en la imagen, el narrador es quien la ve: “Podés dejar algo más o menos explícito para el espectador, pero es él quien finalmente arma su propio viaje por la imagen y eso, para mí, es increíble”.
Otra de las características que el diseñador reconoce en su trabajo artístico es la atemporalidad: “Lo atemporal va un poco por el mismo camino. Le doy la bienvenida a la ambigüedad propia de la imagen. Me parece que por ahí está lo que la hace interesante”. Para él, esto se acentúa cuando la pieza artística está vinculada a temas que no tienen un límite temporal, como los sueños, pensamientos o emociones.
Bologna Children's Book Fair 2020
Alfonso Lourido fue seleccionado para participar en la sección Illustrator Wall de la Bologna Children's Book Fair 2020, uno de los eventos más reconocidos de literatura infantojuvenil a nivel mundial. Este año, Illustrator Wall se llevará a cabo virtualmente por la pandemia del coronavirus.
“Fue de rebote”, resume Alfonso sobre cómo se dio esta participación. El año pasado, fue parte de la selección uruguaya de ilustradores que integró el catálogo oficial de Uruguay para Bolonia 2019. Sin embargo, este año confiesa que estaba con la cabeza en otros temas, por la llegada del Covid-19.
¿Cómo fue entonces que quedó seleccionado? Gracias a las redes sociales. Alfonso vio un posteo en Facebook por el que se enteró de que este año la muestra Illustrator Wall sería virtual. En ese momento, faltaban uno o dos días para el cierre de las postulaciones y envió una imagen que forma parte de su proyecto personal “El buzo amarillo”, un libro ilustrado que desarrolló junto a su esposa Ana Semino, quien es escritora y diseñadora teatral.
“La cosa es que hace unos pocos días me enteré, también de casualidad por un posteo de Instagram, que había sido seleccionado”, cuenta Alfonso. En esta sección participan 2.500 artistas de cinco continentes y 80 países. La muestra se puede seguir online desde cualquier lugar.
Arte en medio de la pandemia
La llegada del Covid-19 al país generó cambios para todos. Alfonso es copropietario de una productora audiovisual (Carajito Films) y en ese rubro, el trabajo cambió bastante. Sin embargo, él entiende que debemos adaptarnos y buscar el crecimiento en medio de la crisis: “Hay infinitas aristas que se desdoblan de esta situación y eso es una oportunidad”, indica.
Con respecto a sus planes, Alfonso tiene varios y está muy agradecido por cada uno: “Tengo dos proyectos personales de libros ilustrados y cada uno está en distintas etapas. Hay que ver fechas porque este año es muy especial”. Además, está ilustrando productos para el exterior y, con Carajito Films, tiene varias apuestas que espera concretar en este 2020 inquieto, como él mismo lo define.