“El blockchain es el nuevo internet del valor. El primero fue el internet de la comunicación, de difundir ideas. El segundo fue el de las redes sociales, donde no había únicamente una comunicación estática sino interacción y diálogo. Ahora la interacción no solo es entre las personas sino con el valor”, indicó el Ing. Pablo Coirolo, MBA —CEO de Americas Aeternity y CEO fundador de Light 47— durante la conferencia “El nuevo internet del valor en los modelos de negocio”.
El evento se llevó a cabo el miércoles 4 de setiembre, en el Campus Pocitos de la Universidad ORT Uruguay. La conferencia formó parte del Ciclo de Charlas de Management y Negocios que organiza la Escuela de Postgrados. Coirolo concurrió en el marco del acuerdo entre el Centro de Innovación y Emprendimientos (CIE) y Aeternity, que dio como nacimiento al Centro de Innovación en Blockchain Aeternity en ORT.
Blockchain y el cambio en el modelo de negocios
En los últimos años hubo un cambio total de modelos de negocio. Un cambio que en la década de los 90’ no era imaginable y hoy es una realidad. El experto ejemplificó: “Uber, la mayor empresa mundial de transporte, no tiene un solo taxi. Airbnb, la mayor empresa de hospedaje en el mundo, no es dueña de una propiedad. Facebook, la mayor empresa de producción de contenido, no genera contenido”.
Coirolo definió al blockchain como un sistema distribuido de base de datos, en el que todos los nodos (computadoras con una copia de la red) están sincronizados para llevar un registro de la transferencia de la información. Cada nodo cuenta con copias exactas de la base de datos distribuida.
El conferencista señaló que en blockchain los cambios ocurren más rápido que en los formatos tradicionales y nombró algunas de las empresas que hoy están utilizándolo: Société Générale, Santander, Visa, Barclays, ABN AMRO.
Un nuevo sistema de seguridad
Coirolo citó a John Chambers, ex presidente ejecutivo y CEO de Cisco Systems: “Existen dos tipos de empresas: las que han sido hackeadas y las que aún no saben que fueron hackeadas”. Mencionó como ejemplos el hackeo masivo en 2019, a millones de personas, que tuvo lugar en Bulgaria y el hackeo del pasaporte de la ex primera dama Michelle Obama.
“En la historia no hay un solo castillo que no haya sido asaltado, por más grande que fuera. Hay que aprender de la historia: todo va a ser vulnerado, es cuestión de tiempo”, señaló Coirolo.
Blockchain propone un nuevo concepto de seguridad. El hecho de que sea un sistema descentralizado lo vuelve más seguro. Al estar compuesto por nodos perfectamente sincronizados independientemente del lugar en donde estén, hackearlos es más difícil que hackear un sistema centralizado.
El experto explicó: “Toda la historia del mundo la han escrito los que ganan, entonces la historia se puede cambiar. Sin embargo, blockchain es un registro inmutable”. Como cada nodo cuenta con una copia idéntica del registro compartido, ninguna lo puede modificar.
Al igual que a fines de la década del 90 podía generarse una confusión entre e-mail e internet, Coirolo señaló que ahora se confunde blockchain con bitcoin: “Bitcoin es la primera buena aplicación sobre la red de blockchain. Esto no significa que todo blockchain funcione con bitcoin”. Bitcoin es un ejemplo de token. El token es una unidad de valor similar a una moneda y “el nuevo activo digital”.
En 2008, Satoshi Nakamoto (seudónimo de una o varias personas con identidad desconocida) inventó el bitcoin. A partir del surgimiento del bitcoin, se creó Ethereum, una plataforma de contratos inteligentes. Este tipo de plataformas brindan la tranquilidad de que el contrato se ejecutó bajo las condiciones que estaban establecidas. “Esto revolucionó todos los negocios”, indicó Coirolo, ya que “al estar en un blockchain, la información es independientemente comprobable por todos los actores”.
“Estamos evolucionando hacia la economía tokenizada, en la que todos los aspectos de la vida van a estar expresados por tokens. A la vez, se están generando nuevos marcos legales regulatorios que habilitan la transferencia de tokens a través de las fronteras”, dijo Coirolo.
La evolución del mercado digital implica la “tokenización” de activos, es decir: capturar el valor de objetos del mundo real y convertirlo en tokens, así como la creación de fondos de inversión tokenizados y de cambios regulados para tokens. Entre los beneficios de vivir en una economía tokenizada, Coirolo destacó la posibilidad de evitar fraudes en los títulos gracias a los registros en el blockchain, la mayor eficiencia, transparencia y el menor costo de las transferencias.