Agustina Michelin, graduada de la Licenciatura en Gerencia y Administración de la Universidad ORT Uruguay, MBA de INSEAD y Associate en McKinsey & Company (Madrid), contó cómo fue realizar uno de los postgrados en negocios más importantes del mundo, las herramientas que le dio ORT y su trayectoria profesional.
Cursaste el MBA de INSEAD, uno de los programas más prestigiosos del mundo. ¿Cómo fue esa experiencia?
Fue una experiencia increíble y muy enriquecedora a nivel personal y profesional. Nunca me imaginé compartir clase con estudiantes de más de 90 nacionalidades. Cada discusión era un intercambio cultural que me ayudó a poner en perspectiva los diferentes problemas que atraviesan las empresas.
Y, sin duda, tener la oportunidad de vivir en una ciudad tan linda como Fontainebleau, donde cada salida a correr era terminar con vistas al Château, hacen de la experiencia del MBA aún más especial.
¿Qué herramientas te dio la Licenciatura en Gerencia y Administración de ORT para realizarlo?
La Licenciatura te prepara muy bien para comenzar en el mundo profesional. En mi caso me dio no solo las herramientas, sino también la confianza para empezar mi carrera. Los ejercicios prácticos permiten que uno se equivoque y aprenda rápido en un entorno seguro. Gracias a esos tantos “golpes” creo que salí al mundo profesional bien preparada.
¿Qué fue lo más importante que aprendiste en INSEAD?
Académicamente me permitió reforzar mi conocimiento en estrategia y finanzas.
No solo estudiamos los casos de las empresas, sino que además tuvimos la oportunidad de tener a los propios protagonistas de los casos contándonos su experiencia.
Más allá de lo académico, creo que he crecido mucho a nivel personal y en temas de liderazgo. Desde el día uno la universidad te asigna un coach que te acompaña durante todo el año y te ayuda a encontrar tu forma individual de liderazgo.
¿Cómo ha sido tu trayectoria profesional?
Comencé trabajando en Sacramento Management en temas de marketing digital y revenue management. Luego pasé a LATAM Airlines en Uruguay, donde estuve a cargo del e-commerce. Al año me ofrecieron un puesto en Chile viendo el e-commerce de todos los mercados donde LATAM Airlines operaba. Ahí es donde empezó mi carrera fuera de Uruguay.
En Chile comencé enfocada en e-commerce, pero por alguna de esas vueltas de la vida terminé trabajando en digital como Product Owner y aprendiendo de arquitectura de software. A los tres años decidí embarcarme en la aventura de hacer un MBA y así es cómo terminé en INSEAD y en McKinsey & Company.
Con la perspectiva del tiempo, ¿cómo valorás las herramientas que te dio la Licenciatura en Gerencia y Administración de ORT?
Creo que la carrera combina de forma muy balanceada la teoría y la práctica. Cuenta con un cuerpo docente que tiene mucha experiencia. Al poder personalizar las materias que se quieren cursar, creo que logré ganar las herramientas de marketing que necesitaba para salir al mercado sin perder la perspectiva de las finanzas y operaciones de la empresa.
En tu trayectoria has tenido funciones destacadas en las áreas de marketing y en los negocios digitales. Específicamente en estas áreas, ¿qué herramientas te dio ORT para desempeñarte en estas funciones?
No fueron solo las herramientas de marketing. Creo que lo más valioso que tiene la Licenciatura en Gerencia y Administración es la perspectiva completa que uno gana de las diferentes áreas de una empresa porque, para crecer en ellas y ser un buen líder, es necesario entender cómo conviven todas las áreas y cómo se puede sacar lo mejor de cada una. En marketing, por ejemplo, es necesario saber comunicarse con el área financiera, para que no te vean solo como un gasto.
Actualmente te desempeñás en McKinsey, una consultora estratégica muy importante. ¿Cuáles son tus desafíos y responsabilidades allí?
En enero comencé a trabajar en McKinsey & Company en Madrid como asociada, enfocada en temas digitales. Por la forma en la que trabajamos, el desafío es constante: aprender sobre una nueva industria, poder analizar un problema y buscar las soluciones, y, sobre todo, construir una relación de confianza con el cliente para poder trabajar en conjunto.
¿Qué le recomendarías a las nuevas generaciones?
En primer lugar, tener determinación en lo que quieran conseguir. Esto no quiere decir ser asertivo siempre. A veces es normal equivocarse, pero es importante llegar a ese objetivo para darse cuenta.
En segundo lugar, ser curioso. Muchas veces nuestro cerebro es vago y se queda cómodo con la primera explicación que encuentra. Sin embargo, generalmente los problemas se entienden al analizarlos en profundidad.
Por último, equivocarse sin miedo. Más cuando se tiene la oportunidad de probar de una forma muy segura durante la carrera. La verdad, al principio, cuando decidí irme a Chile, no estaba segura, pero preferí equivocarme a quedarme sin intentarlo.
¿En qué áreas crees deben formarse las nuevas generaciones para el mundo de hoy?
Hoy hay muchas especialidades y cada uno elegirá en base a sus intereses personales, lo que permitirá disfrutar más de su trabajo. Por eso creo que lo importante es formarse en soft skills. Me parece vital conocer la forma de liderazgo de cada uno y cómo adaptarse en los diferentes equipos de trabajo, porque eso es algo que muy pocas veces vamos a poder elegir.