El equipo irlandés conformado por las arquitectas Yvonne Farrel y Shelley McNamara fue merecedor del premio en su edición 2020. El estudio Grafton Architects tiene sede en Dublín, Irlanda y fue fundado en el año 1978.
El galardón fue entregado el 3 de marzo de 2020 en Chicago (Estados Unidos) y es organizado anualmente por la Hyatt Foundation, una organización sin fines de lucro que reconoce el trabajo y el legado de los arquitectos a nivel mundial.
El jurado de este año estuvo integrado por: Kazuyo Sejima (Japón), Benedetta Tagliabue (España), Wang Shu (China), Barry Bergdoll (Estados Unidos), Deborah Berke (Estados Unidos), Stephen Breyer (Estados Unidos) y André Aranha Corrêa do Lago (Brasil).
El jurado destacó la sensibilidad del trabajo de Grafton Architects hacia el paisaje que ocupan sus edificios, la preocupación por el cambio climático y la naturaleza en cada una de sus propuestas. La mayor parte de su obra ha sido proyectada y construida en Irlanda, pero también han trabajado en el Reino Unido, Francia, Italia y Perú.
Es una arquitectura de formas puras y composiciones complejas, que permite la integración de diversas actividades en recintos amplios y llenos de luz natural. En la trayectoria de las arquitectas, se denota su formación racionalista, la clara influencia del brutalismo y del estilo internacional.
Dentro del veredicto del jurado, se destaca:
Por su integridad en el enfoque tanto de sus edificios, como por la forma en que realizan su práctica, su creencia en la colaboración, su generosidad hacia sus colegas, especialmente evidenciada en eventos como la Bienal de Venecia 2018, su compromiso incesante con la excelencia en arquitectura, su actitud responsable hacia el medio ambiente, su capacidad de ser cosmopolitas al tiempo que adoptan la singularidad de cada lugar en el que trabajan, por todos estos motivos y más, Yvonne Farrell y Shelley McNamara reciben el Premio Pritzker de Arquitectura 2020.
Un premio que se traslada a las arquitectas
Es el primer año en que el premio ha sido concedido a un equipo integrado únicamente por mujeres. En el año 2004 lo ganó en solitario la arquitecta Zaha Hadid, en 2010 el estudio japonés Sanaa integrado por Kazuyo Sejima –jurado de ésta edición- y Ryue Nishizawa y en 2017 la firma catalana RCR conformada por los arquitectos Carme Pigem, Ramón Vilalta y Rafael Aranda.
En los últimos años, el premio ha sido concedido a equipos de arquitectos que están fuera del entorno mediático. Es una clara intención de la Hyatt Foundation por destacar la calidad de la arquitectura sobre el impacto del star system, denominación que se le atribuye a las grandes firmas de arquitectura de finales del siglo XX e inicios del siglo XXI.