Entrevista a Alejandro Esperanza, Licenciado en Estudios Internacionales por la Universidad ORT Uruguay. Esperanza es CEO y cofundador de la plataforma de moda sustentable Vopero.
Esta startup uruguaya fue creada para impulsar la industria de la ropa de reventa, reinyectando artículos en buenas condiciones al mercado, permitiendo que nuevos clientes accedan a un catálogo de moda asequible y sostenible a través de una experiencia personalizada única.
¿Cómo surgió la idea de crear Vopero?
La idea la tuvo Maggie Ferber, mi socia, quien vivió 10 años en Estados Unidos y viene de una familia que trabaja en moda, por lo que el tema está en las conversaciones familiares.
Ella decidió volver a Uruguay y crear la plataforma. Fue entonces que nos convocó a Ignacio Cattivelli y a mí, formamos el equipo y elegimos el modelo de negocios con el que trabajaríamos. Cumplimos un año en noviembre de 2021.
¿Cuál es el público de Vopero?
Es un público muy variado, tanto en cuanto a quienes venden como a quienes compran.
Las vendedoras, por lo general, son mujeres de 18 a 50 años que tienen un porcentaje de ropa de su closet que nunca usaron. Es un proceso en el que sienten que tienen control y, a la vez, que las apoyamos. Por ejemplo, al proveerles tecnología para permitirles lucir la ropa que quieren exponer de la mejor manera.
Lo que buscamos es que a todos los compradores les sea cómodo, sabiendo que chequeamos la calidad, que es un servicio consistente.
¿Por qué es positivo comprar ropa de segunda mano?
Tiene un impacto directo en el ecosistema, en el medioambiente. Crear ropa, fabricarla, genera daños irreparables. La moda es una de las industrias más contaminantes del mundo.
Al comprar ropa de segunda mano, se ayuda al ecosistema, dándole una segunda oportunidad a prendas que, en nuestro caso, están en perfecto estado y merecen esa chance. Se cierra el círculo sin que terminen en un basurero.
¿Los uruguayos están abiertos a comprar ropa de segunda mano?
Con respecto a los uruguayos y la ropa de segunda mano, para nosotros era uno de los desafíos más grandes que teníamos. Si bien se trata de un mercado chico, salimos con la idea y con el optimismo de que los uruguayos lo aceptaran. Al final, hay un tema del boca a boca que ha funcionado positivamente para nosotros.
Hoy en Vopero venden miles de personas que en su vida hubiesen imaginado que iban a vender ropa en una plataforma. También hay miles de personas comprando que nunca hubiesen pensado en comprar ropa usada.
Vopero ofrece buena calidad a bajos precios. Lo hemos venido haciendo bien y lo vamos a hacer cada vez mejor. Eso hace que nosotros agrandemos la oportunidad a partir del servicio y el producto que ofrecemos.
¿Cómo observás que está siendo el crecimiento de la empresa?
Está de acuerdo a lo esperado, incluso la velocidad con la que lo ha hecho superó las expectativas. Obviamente, como emprendedores, soñamos con que las cosas van a ir bien y para eso trabajamos todos los días. Pero estamos muy contentos con el resultado y entusiasmados con que no pare, poder llegar cada vez más a nuevos compradores y vendedores.
Teniendo en cuenta que hoy en día buscan acceder a más mercado en Latinoamérica, ¿en qué sentido la carrera de Estudios Internacionales amplió tu visión sobre este mercado?
Creo que la carrera me ha ayudado en todo mi desarrollo profesional. O sea, mi primer trabajo lo conseguí gracias a ORT en una naviera. Eso me permitió tener un trabajo con mucho contacto con el mundo de las mercaderías, conocer el ecosistema de importadores, de exportadores, no solo en Uruguay sino en Sudamérica.
Creo que el contacto con el mundo y conocer distintos países es muy importante para poder darle forma a eso que siempre se dice de pensar en grande.
Estar en contacto con lo que sucede te permite entender o dimensionar las oportunidades y materializar cuáles son las barreras reales de acceso y, al mismo tiempo, la dimensión de la oportunidad. Eso te anima a ir a por ello. En ese sentido, la carrera ayuda mucho.
Estudiar en ORT fue una etapa muy buena de mi vida. Implicó ponerse objetivos, tratar de cumplirlos en determinado plazo de tiempo. Eso es lo que te da una carrera: un marco de trabajo y contexto personal que te permite salir adelante en la vida profesional con los distintos desafíos que uno tiene.
¿Qué herramientas aprendiste en la facultad que utilizás hoy en tu vida profesional?
Todos somos un poco un híbrido de todo lo que vamos aprendiendo y viviendo. La carrera, sin lugar a dudas, ha tenido un impacto positivo en lo personal y profesional. Estoy agradecido por haber tenido esta experiencia, así como lo estoy por los distintos trabajos que tuve.
La combinación entre la experiencia académica y la profesional estrictamente es la que hace a un buen profesional y, en ese sentido, estoy muy agradecido con la universidad.