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ORT Rambla, el edificio de la universidad ubicado en la calle Cebollatí, abrió sus puertas en 2022 y, desde abril de este año, recibe a los estudiantes de la Escuela de Postgrados y Actualización en Comunicación y Diseño.
“Estamos en una escuela que naturalmente nació de la creatividad y la innovación, se puede decir que es la primera escuela de postgrados especializada en habilidades blandas”, sostuvo el decano de la facultad, Ing. Eduardo Hipogrosso. “Es un gusto que sean tantas las especialidades, que vengan de distintas profesiones, todos con muy buen nivel”.
Hipogrosso aseguró que todos, desde estudiantes hasta docentes, van a pasar por un proceso de “crecimiento personal”.
¿Por qué postgrados?
La secretaria docente de la Escuela, Mag. Sabrina Bianchi, respondió: “Porque nuestras disciplinas ya están en otro estado y no necesitan, solo, actualizarse, sino profesionalizarse”. Recordó “el juego” que se hace entre cerebro izquierdo y cerebro derecho. “Quienes vienen de las ciencias duras necesitan adquirir habilidades más creativas; quienes venimos de campos creativos, como comunicación y diseño, pasarnos del Power Point al Excel”.
Cambió la fecha de vencimiento del conocimiento y tenemos que sumar talentos distintos a nuestras formaciones universitarias.
Bianchi ahondó en los tres lemas de la Escuela: “Acelerá tu futuro”, “Potenciá tus talentos” y “Descubrí tu mejor versión”. Todos podemos descubrir nuestra mejor versión durante 15 o 20 años, dijo, y llegar a tener cierto expertise. “Ahora, ser profesionales es tomarnos en serio las disciplinas y la profesión; decir, ‘voy a sistematizar este conocimiento, voy a intercambiar con otros y voy a salir mejor preparado para lo que tengo que hacer en la práctica’”.
Conocé la propuesta de la Escuela de Postgrados y Actualización Profesional
Repensar y emprender
Daniel “Tatita” Márquez es músico, embajador marca país en Uruguay y también emprendedor. “La tecnología siempre fue algo que me atrajo mucho porque, cuando tocaba la guitarra, tenía pedales, como todos los guitarristas. Cuando trasladé eso a la percusión, empecé a ver qué pasaba si yo agregaba un pedal, ver cómo sonaba, cómo distorsionaba ese sonido”, narró. En 2005 incursionó con las pedaleras loop station —con un pedal se graba y con el otro se pone stop— que le permitían ir grabando y, arriba de eso, tocando otra cosa. En ese momento, en Uruguay no tenía competencia, le empezó a ir bien, incluyó todos los instrumentos de percusión y pudo componer música con ese método.
Llegó un momento en que decidió “largar todos los pedales” y comprarse una computadora con el objetivo de “aprender a usarla para producir música” para conseguir el sonido que buscaba. Llegaron los viajes importantes, largos, a Estados Unidos, Asia, Europa. “Todo eso estaba genial, pero en un momento pensé que, cuando tenía que tocar solo, sería bueno que hubiese unos brazos, unos robots que me acompañen”. Y así nació una idea que desembocó en Robotic Drums.
Luego de varios años y mucho camino recorrido, en 2015 se fabricó el primer robot, “que funcionaba bien, pero era una cosa muy frágil”. De hecho, se rompieron en el primer país de la gira mundial de 2017. Un año más tarde, en China, le preguntaron si no le gustaría fabricar y vender. “Nunca había pensado que esto que había ideado para tocar solo, era un producto para vender”, comentó. Volvió a Uruguay y se reunió con Nicolás Jodal, de Genexus. “Me encanta, vamos a incubarte”, le dijo, con lo que comenzó otro proceso, de más de un año. “Yo soy músico, ser emprendedor es otro plan. Pero me encantó”. Se presentó a la ANII, ganaron dos proyectos y llegaron a hacer este robot, que es el que llevó a ORT Rambla en la Bienvenida de los Postgrados 2023.
Descubrir el potencial
Hace ocho o nueve años, la Lic. Gabriela Rocha se fue del periodismo buscando un nuevo horizonte profesional: “Lamentablemente no existía el Master en Dirección de Comunicación y Marketing, creo que hubiera sido mi primera opción”. Entonces empezó a estudiar un postgrado centrado en negocios y, casi en seguida, la llamaron de Ferrere Abogados con el desafío de crear el Departamento de Marketing y Comunicación.
“Para mí era soñado, pero capaz que no estuve ni un día de los primeros seis meses sin querer renunciar”, confesó la docente. Había ingresado a empresa con 20 años de trayectoria, que tenía una marca regional y trabajaba mucho el marketing y la comunicación; Rocha creía “que iba ahí a hacerlo todo”, pero en realidad ya se estaba haciendo. Lo que Ferrere necesitaba era profesionalizar el área, centralizarla. “Entonces hice ese clic y me dije, ‘tengo que ganarme mi lugar, ellos ya me lo dieron, pero yo me lo tengo que ganar’. Comparto esto que puede no parecer alentador, pero sí lo es, porque me ha pasado bastante que cualquier persona opina de tu disciplina con liviandad. La buena noticia que tengo para darles es que esto, hace años, empezó a cambiar. Hoy puedo decir con certeza que Comunicación y Marketing son áreas potentes dentro de la empresa, por lo menos, por dos motivos, por reputación y por el futuro”.
Master en Dirección de Comunicación y Marketing
El Lic. Santiago Fagnoni, docente del Diploma de Especialización en Diseño de Experiencia de Usuario, les pidió un favor a los nuevos estudiantes: elevar la mirada del Uruguay. “Nosotros, que somos del Uruguay, del perfil bajo, tenemos muchísimo potencial como para levantar la mirada y apuntar más lejos, más alto. El mundo está hablando de nosotros y capaz que nosotros nos olvidamos de hablar de nosotros mismos. Somos el hub de innovación y a nosotros nos falta tomar parte de ese protagonismo”.
Diploma de Especialización en Diseño de Experiencia de Usuario
Desde el Master en Creatividad, Innovación y Comunicación, el docente Fabián Barros, MA, afirmó que “es un momento totalmente fascinante” lo que está pasando a nivel de tecnología. “Es como un momento perfecto porque ninguno sabe nada. Estamos todos en igualdad de condiciones, como empezando, tratando de comprender. Y la manera de hacerlo es compartir. Nosotros podemos darles un montón de cosas desde la experiencia, pero todos tenemos algo para aportar. Necesitamos nutrirnos unos de otros”.